jueves, 7 de mayo de 2009

“El ayuntamiento de Cartagena lleva 14 años ignorando a Cabo de Palos”


La portavoz socialista Caridad Rives denuncia que lo único que se va a hacer este año en la zona es mejorar el acceso a la carretera de subida al Faro, “y para eso tienen que intervenir 2 consistorios y la Comunidad Autónoma”

La portavoz del Grupo Municipal Socialista, Caridad Rives, asegura que el ayuntamiento de Cartagena lleva “14 años ignorando a Cabo de Palos”. Esta es una de las pocas localidades que no van a recibir ninguna subvención del Plan E, a pesar de que se trata de uno de los rincones más emblemáticos del turismo de sol y playa del municipio de Cartagena. “La única inversión que se va a hacer este año es para mejorar el acceso a la carretera de subida al Faro, y para eso van a tener que intervenir dos ayuntamientos y la Comunidad Autónoma”, señala Rives.

Varios miembros del Partido Socialista acompañaron recientemente a los vecinos en una visita a Cabo de Palos para escuchar de primera mano sus necesidades más apremiantes. Quejas que serán convertidas en moción y trasladadas al próximo Pleno municipal.

Dos de los mejores ejemplos de la falta de interés del Ayuntamiento por esta localidad son el estado deplorable en el que se encuentra el molino de Cabo de Palos, declarado de Interés Cultural, y la situación de abandono que persiste desde hace 16 años de la parte posterior del centro comercial Las Dunas, que carece de vallado alguno y se encuentra repleto de basura, escombros y ratas, y que se ha convertido en una de las reivindicaciones históricas de los vecinos de la zona.

“Además, desde el día 1 de febrero hay información gráfica de una arqueta, situada entre la calle Cala Reona y la avenida de las Calas, que está vertiendo aguas fecales, convirtiéndose en un foco de insalubridad permanente, cuyos efectos aumentan con el calor de los últimos días”, asegura la portavoz socialista.

Los problemas de esta localidad empiezan justo al entrar en la redonda de acceso que se encuentra llena de basuras y matorrales ofreciendo a los posibles visitantes una “imagen lamentable”. Tanto la entrada hacia Cala Reona como la del UPER necesitan urgentemente un acerado en condiciones y un carril bici que sirva de enlace con el centro del pueblo.

Otra de las quejas de los vecinos son las instalaciones deportivas, que actualmente se encuentran infrautilizadas debido, entre otras cosas, al deficiente mantenimiento por parte de los servicios municipales, y que los residentes querrían convertir en una pista de skate. “Es una contradicción que estas instalaciones estén infrautilizadas y que colectivos de las inmediaciones tengan que dejar de desarrollar sus actividades deportivas por falta de espacio”, comenta Rives.

Importante también es la necesidad de contar con un transporte público en condiciones, con una mayor frecuencia de paso y que llegue hasta Cala Flores. Esta falta de transporte pone también de manifiesto la necesidad imperiosa de enlazarlo con el trazado de FEVE.